MRARIA CARLOS
Aunque la manipulación tiene muchas caras, su resultado es uno solo: el sufrimiento de la persona manipulada.
Son muchas las personas que se han sentido usadas, abusadas, desvalorizadas y luego descartadas.
Palabras como mobbing y bossing, que antes formaban parte del vocabulario técnico de unos pocos expertos en relaciones laborales, hoy están en boca de muchos que experimentan la manipulación y el abuso en el espacio laboral.
El ámbito escolar tampoco es ajeno a la manipulación, y son muchos los jóvenes y niños que hoy sufren del bullying, a veces con consecuencias aterradoras.
Encontramos también iglesias, ministerios y líderes que manipulan a la gente a nombre de objetivos a veces loables y a veces oscuros. Esta es una de las causas por las que un alto porcentaje de personas en nuestro continente ya no asisten a las iglesias.
De aquí la utilidad de este libro, escrito con una triple intención. En primer lugar, que las muchisimas personas que han sufrido a causa de los manipuladores puedan entender lo que les ha sucedido y por qué les paso, y puedan ser sanadas.
En segundo lugar, que los que han permitido que la manipulación se convierta en un esquema de conducta en su vida y en su manera de relacionarse con los demás, comprendan tanto el daño que producen como la razón por la cual se han convertido en manipuladores, y también sean sanados.
Y en tercer lugar, que este libro sirva para impedir que seamos víctimas de la manipulación: que nos enseñe a no caer en sus garras y nos alerte para no convertirnos en verdugos dedicados a lastimar a los demás.