GONZÁLEZ MORENO FÉLIX
Una de las características más generalizadas en la sociedad del siglo XXI es el activismo. Vivimos envueltos en un activismo febril en todas las cosas y a todos los niveles: tanto a nivel institucional como a nivel personal. Y la iglesia no es una excepción: multiplicamos la organización, nombramos juntas y comisiones, ponemos en marcha programas y actividades.Ello no tendría nada de malo, todo lo contrario, si no fuera por el peligro que conlleva caer en el mismo error que el Señor recriminó en el Apocalipsis a la iglesia de Éfeso, a saber: "Conozco tus obras, y tu arduo trabajo
pero tengo contra ti que has perdido el primer amor".
Las duras palabras dirigidas a la iglesia de Éfeso tienen una aplicación directa al día de hoy, no sólo al cuerpo eclesial, sino a cada uno de nosotros individualmente. Con frecuencia, trabajamos tanto para el Señor que no tenemos tiempo para estar a solas con Él
A través de una exposición y un estudio detallado de la primera carta que el Cristo glorificado envía a su Iglesia en Éfeso, y aplicándola a la situación que vivimos en el mundo actual, el autor nos amonesta a evitar este pecado en el que tan fácilmente incurrimos, como individuos y como Iglesia, sin darnos cuenta.