GIL GONZÁLEZ JUAN JOSÉ
Muchas congregaciones han adoptado ritmos hebreos, instrumentos típicos de Israel, decorados netamente veterotestamentarios, y un cierto aire judío, que actúa casi como un mensaje subliminal, y hace desear a los miembros de esas congregaciones pertenecer a esa nacionalidad u origen étnico, como si eso supusiera una ventaja. De esta forma, una sutil judaización se sigue infiltrando en las iglesias evangélicas.